sábado, 7 de septiembre de 2013

Capítulo 6.

Zayn se fue a hablar con los padres de Niall. Me fijé en la forma en la que andaba. Era tan perfecto. Cualquier cosa lo hacía perfecto. Por eso le odiaba. Le odiaba con toda mi alma. Odiaba su forma de hablar y su ego. Era el típico chico que iba de flipado por la vida pero en realidad no era nada.
- ¡Cassie!- dijo llamándome la atención Hayley mientras me zarandeaba.- ¿Qué te pasa? - negué con la cabeza para que supiese que no era nada. - Vete a casa a descansar, tienes la cara muy pálida. Hoy ha sido un día muy largo, anda.
- ¿Eh? No, yo me quedo esta noche con Niall, vete a casa con tus padres para estar con ellos, ahora mismo lo que necesitáis es estar juntos, Hay.- Ella sabía perfectamente por qué me quería quedar, y no se trataba solo de que ellos estuvieran juntos.
-Cielo, no ha sido culpa tuya, ¿vale?- Me susurró mientras me daba un gran abrazo.
Justo después, Hayley se fue con sus padres y decidí volver a entrar a la habitación. Y ahí estaba él tumbado, sin moverse, con miles de aparatos y cables. ¿Cómo no me iba a sentir culpable? Me senté en su cama, a su lado, como dije que lo estaría siempre.
-Oh, Niall, no sabes cuánto lo siento, en serio. Soy un puto monstruo. Si no estuviese aquí, seguro que tú serías feliz. No como ahora, que no puedo ver ni una pizca de esos preciosos ojos que para mi son un mar. No sé cómo te he podido hacer esto. Te he jodido. Se me da bien joder a las personas. Pero no me enorgullezco de ello..- Sin darme cuenta ya estaba mojando sus mejillas con mis asquerosas lágrimas. - Por cada lágrima que derramo, una parte de mí tendría que desaparecer, así, no causaría tantos problemas. Un mano me tocó el hombro de repente. Y por eso me sobresalté. Me aparté y me di la vuelta. Era él. Me encontré con sus preciosos ojos marrones. Parecía preocupados.
- Em.. Lo siento, Cassie.-  Cuando dijo mi nombre, un pequeño escalofrío recorrió toda mi columna vertebral.
-No pasa nada, Zayn. Solo que no te escuché entrar.- Contesté limpiándome las lágrimas de la cara. No me gustaba que me viese llorando, pero ya no había vuelta atrás.
-¿Te vas a quedar a dormir?- Me preguntó.
-Sí, quiero estar con él, ya que...- tengo la culpa de que no pueda estar sonriendo ni andando. Esto lo susurré en mi mente. Me lo clavé en el corazón. Zayn hizo una pequeña mueca de dolor y me dio un abrazo que me transmitió de todo. Desde un no fue culpa tuya a un estoy aquí para lo que quieras. Pero aunque ese abrazo transmitiera tanto, no se lo correspondí. Ni siquiera me sabía su nombre gracias a él. Me aparté y me senté en la cama que había al lado. Zayn se quedó mirando a Niall con pena en los ojos y apretando la mandíbula para evitar que cayesen lágrimas por sus ojos. Se le notaba triste y también me sentía culpable por eso. Ahora mismo tenía la culpa que tanta que gente de mi alrededor estuviese triste. Todo, por mi puta culpa. Si es que no sabía hacer nada en esta vida, sería mejor que desapareciese..
-Esta noche me quedaré aquí contigo. - Me interrumpió de mis pensamientos. ¿Qué? ¿Que se quedaría? Otro escalofrío, pero este fue como más cálido. Me sentía como..¿protegida? No sé, era extraño.
-No.-Le contesté secamente. Aunque mis manos estaban sudando. ¿Porqué sentía todo esto? Él sólo dormiría en un sillón.
-Sí.- Me contestó él igual de seco que yo.- Tú eres su mejor amiga y te quedas, yo soy su mejor amigo y tengo el mismo derecho.
Mierda, eso era indiscutible. No asentí ni dije nada, solo, me tumbé en la cama, mirando hacia el techo. Mirando hacia la nada.
Él lo entendió como un sí y se sentó en el incómodo sillón que había.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Opina sinceramente, por favor.